Sesiones de sanación canalizadas, desde el poder intuitivo y la meditación, que ayudan a la persona a restaurar el equilibrio, y tambíen a distancia.
Un compendio de otras técnicas como el shiatsu, acupuntura, moxibustión, ito-thermi, reiki, geometría sagrada, cirugía energética, neo diseño humano, craneosacral, entre otras, son la base de mis estudios, pero a través de los años de experiencia se han ido integrando en mi, para ahora utilizarlas desde la vertiente más sutil. Incorporando también la experiencia como medium y canalización.
Me gusta ayudar a equilibrar a las personas, para que encuentren de nuevo su paz interior y puedan continuar su camino de vida con mayor fluidez y claridad. Para cada situación y persona, hay una técnica disponible, pero encontrar adecuadamente la que conviene, es todo un arte.
Sesiones a Distancia:
Con el tiempo y la práctica he comprobado que las sesiones que realizo a distancia, son igual o más de efectivas que las que hago habitualmente en persona. Por tanto si ves que con las herramientas de que dispones, no es suficiente, puedo echarte una mano.
Temas prácticos:
– Necesitas enviarme un whatsapp +34 646327632, y allí te contestaré en cuanto pueda para concretar el mejor momento para que me llames por teléfono o cualquier otro medio para hablar directamente.
– Después de hablar necesitas estar en un lugar donde puedas relajarte, bien sea tu propia cama o sofá y donde nadie te va a molestar durante al menos una hora.
– No importa lo lejos que vivas, la energía funciona sin tiempo ni espacio.
Sesiones de una hora.
¿En que consiste una sanación a distancia?
Se trata de armonizar a la persona que se siente en desequilibrio, teniendo en cuenta que puede ser tanto en el cuerpo físico, emocional, mental o energético. La persona que recibe la sanación necesita estar lo más relajada posible para quitar las máximas interferencias mentales y sentirse receptiva al tratamiento.
Según el tema a tratar y dependiendo de la persona, las sesiones son diferentes. Por ejemplo una persona con una enfermedad física, podrá sentir en la primera sesión una mejora del dolor si es que tuviera, pero dependiendo de la gravedad, se tendrá que tener en cuenta el motivo o causa de la enfermedad, e ir también a su origen. Es diferente un accidente, de una enfermedad consolidada hace tiempo. Normalmente las enfermedades graves, han llegado a materializarse en el cuerpo físico, porque las demás partes que conforman al ser humano (emociones, pensamientos y campos energéticos), también necesitarán un buen repaso y posiblemente desde hace tiempo.
Muchas veces, tener un patrón repetitivo mental o emocional insano y recurrente hace que una enfermedad aflore, y se necesitan varios pasos para poder cambiarlo: reconocerlo, aceptarlo, cambiar hábitos e integrarlos.
Además, desde el conocimiento en medicina china de los meridianos o recorridos energéticos del cuerpo, y habiendo ampliado con la experiencia, que estos canales también existen fuera de nuestro cuerpo físico, siendo muy interesante el tratamiento actuando tanto dentro como fuera del cuerpo. Y ¿Cómo? imagino que os preguntaréis… El arte de la curación, ha existido desde siempre, ya que en toda la historia de la humanidad siempre ha habido gente que ha necesitado sentirse sano y gente que siendo esta su capacidad o su don, han sabido percibir donde estaba la disarmonía que hace que el puzzle (metafóricamente el cuerpo) de la persona no esté funcionando correctamente, o alguna pieza necesita reajustarse.
¿Y como la armonización puede suceder sin estar delante de la persona?, lo importante aquí es la conexión entre la esencia o consciencia del sanador, con la esencia del receptor, ya que cuando entendemos que el tiempo y el espacio son relativos, y tu consciencia puede llegar a comprenderlo, no hay impedimento para sentirte ante la presencia de quien quieras allá donde esté por muy lejos que se encuentre físicamente.
Quiero compartir, que, entre mis muchas experiencias como canal/médium, pude llegar a comprender que el espacio que nos separa a las personas, no existe como tal, ante la consciencia, donde todo lo que existe, es el propio vacío.